La villa de dos pisos refleja una sofisticación moderna, con una fachada que destaca por su forma minimalista y elegante. Las líneas rectas y las superficies lisas en materiales de alta calidad, como concreto y vidrio, crean una estética de simplicidad refinada que se integra armoniosamente con su entorno. La villa está diseñada en torno a un patio interior, que se convierte en el corazón del proyecto, aportando luz natural y frescura a todas las áreas interiores.
El patio alberga una alberca de diseño minimalista, de formas geométricas simples que contrastan de manera sutil con las líneas rectas de la edificación.
La fachada, con sus detalles en tonos neutros y materiales contemporáneos, refleja la pureza de su diseño y se complementa con ventanales que proporcionan vistas directas al patio y la alberca, fusionando interior y exterior de manera fluida